ALEXITIMIA, PENSAMIENTO OPERATORIO Y FENÓMENO PSICOSOMÁTICO


Con la personalidad infantil se distingue entre un desarrollo patológico (lleva a la neurosis) y uno detenido (lleva a la enfermedad psicosomática).
Personalidad infantil, consiste en parte en:

1. Déficit en ciertas capacidades que se adquieren por aprendizaje social.
2. Aceptación nominal de símbolos sin una correspondiente participación del individuo.
3. Dependencia de eventos externos más que generación de decisiones vitales.
4. Falsa madurez con falta de autoexpresión por vía simbólica.
5. Manipulación de objetos más que relaciones interpersonales.
6. Simple control de situaciones más que manejo de ellas.
7. Restringida capacidad expresiva en el terreno verbal.

Hay incapacidad para la psicoterapia, especialmente los con síntomas psicosomáticos. Con esto hay ausencia de una adecuada descripción del sentimiento y una disociación entre esa descripción y la conducta observada.
En la estructura psicosomática habría un pensamiento operatorio con:
1. Esterilidad de expresión verbal.
2. Somatización en lugar de verbalización.
3. Tendencia a responder con acciones frente al conflicto.

Alexitimia

Conjunto de rasgos cognitivos caracterizados por incapacidad paraØ verbalizar adecuadamente emociones y afectos, deficiente fantasía, contenido del pensamiento asociado a los detalles circunstanciales del ambiente externo y otros rasgos semejantes al pensamiento operatorio. Mayor prevalencia en pacientes psicosomáticos. “La ligazón entre pensamiento operatorio, alexitimia con la enfermedad psicosomática, dan origen al fenómeno psicosomático”.

Alexitimia (Sifneos) es la dificultad para diferenciar sensaciones corporales de emociones e incapacidad para encontrar palabras que describan sus propios sentimientos ya que les resulta muy difícil ponerse en contacto con ellos. Tienen deficiente fantasía. Por déficit hereditario o adquirido, tienen sus posibilidades de relación interpersonal señaladas por un persistente vacío y una constante superficialidad, además de no poder controlar los estados somáticos de tensión.

Pensamiento operatorio (Pierre Marty, Escuela de París)

Personalidad Psicosomática

El fenómeno asociado con el llamado tipo de personalidad psicosomática no es necesariamente una anomalía o una falta de capacidad psíquica; es más bien una intensa defensa contra los temores narcisistas o psicóticos.
La disfunción psicosomática puede producirse en sujetos que no son histéricos clásicos ni operatorios desafectivizados. Sería una defensa destinada a proteger al sujeto de estados emocionales primarios, donde la psique busca (como en la histeria neurótica clásica de Freud), con medios primitivos e infraverbales, enviar mensajes que serán interpretados somáticamente.

Vida operatoria: se caracteriza por el pensamiento concreto, escasa vida fantasmática y dificultad para procesar psíquicamente grados altos de tensión.
El Pensamiento operatorio se caracteriza por su ligazón a lo técnico-concreto (se pliega a las cosas, nunca a la imaginación), a la cotidianeidad desprovista de fantasía, sin dimensión histórica.
Cuando las expresiones simbólicas parecen demasiado peligrosas para el Self, el lenguaje es obviado y el mensaje primitivo se expresa mediante el cuerpo.
En la Personalidad infantil se destaca la diferencia entre desarrollo patológico que lleva a la neurosis y desarrollo detenido, que llevaría a la enfermedad somática.
El carácter Superyoico del pensamiento operatorio, hace que el sujeto solo sea capaz de identificaciones superficiales, se trata de un Superyó esquemático y aparentemente no integrado.
Tanto en el Neurótico Obsesivo como en el Psicosomático hay un dominio falso de la realidad. La diferencia es que en el Neurótico Obsesivo, el dominio falso de la realidad es asegurado gracias a la activa manipulación de un pensamiento rico en valores simbólicos, mientras que en el Psicosomático, el dominio falso de la realidad trata de logarlo por un control inmediato del encadenamiento de la acción (para él “la duda” nunca se plantea). En el plano verbal del Psicosomático, las palabras están subestimadas, llegando casi a abolir la distancia entre significado y significante.

Clínica

Por fijación a ciertas etapas del desarrollo, existiría una incapacidad para relaciones transferenciales reales y reduplicación proyectiva (ve a los otros como imagen de sí mismo), lo que explica los riesgos de la separación para tales sujetos. Están encerrados en un campo temporal limitado, su forma de pensamiento está determinado por la noción de sucesión de los hechos (si en algún momento ocurre que se proyecta hacia el futuro o vuelve hacia el pasado, es siempre transformándose en “trozos de presente”).
También hay formas de pensamiento operatorio impuestas por una presión externa, a menudo profesional, y el sujeto agotado por la adaptación a tareas automáticas, llega a no disponer de ninguna expresión liberadora.
El diagnóstico puede hacerse difícil cuando existen manifestaciones somáticas. Sin embargo al cabo de un tiempo el investigador puede descubrir: la receptividad del sujeto a las incitaciones afectivas y el sentimiento de frustración que le causa su forma de vida y puede deducir el carácter traumático de una forma de pensamiento que le es impuesta desde afuera (en estos casos el pronóstico y terapia son mucho más favorables).

Alexitimia: sordomudos del afecto (Joyce Mc Dougall, Escuela de París)

Ubica el origen de esta patología (Alexitimia) en la etapa preverbal en la cual habrían tenido lugar fuertes emociones. Mc Dougall habla de la diferente forma en que los psicóticos y los alexitímicos tratan el lenguaje: “El pensamiento del psicótico puede concebirse como una inflación delirante del uso de la palabra cuya meta es llenar espacios de un vacío aterrador; mientras que los procesos de pensamiento de los alexitímicos intentan vaciar la palabra de su significado afectivo”.
Joyce McDougall, basándose en la experiencia clínica con sus analizados, añade: “Las observaciones de los psicosomatólogos sobre el pensamiento operatorio y la alexitimia me parecieron acertadas. Pero había comprobado, al menos en mis propios pacientes, que estos fenómenos cumplían ante todo una función defensiva, remontándonos a una fase del desarrollo donde la distinción entre el sujeto y el objeto aún no es estable y puede crear angustia”.
McDougall partiendo de las investigaciones de Engel, quien expuso en 1962 que los fenómenos psicosomáticos pueden evitarse cuando una organización neurótica sirve como “escudo” contra la somatización, elabora el concepto de anti-analizado y de NORMOPATÍA. Toma también para ello el concepto de Winicott de falso self.
“Les llamé normópatas y observé al mismo tiempo que manifestaban todas las características de lo que Winnicott llamó falso self. Me parecía que este falso self debía servir, como indica Winnicott, para proteger al verdadero self que de otro modo no hubiera quizá sobrevivido”.
El fracaso de las defensas habituales frente al desamparo psíquico, hará que la persona “somatice” el dolor mental. Habla de una “histeria arcaica”, donde las angustias no están ligadas a la castración, sino al temor de perder la identidad subjetiva e incluso la vida.
Cuando el inconsciente materno obstaculiza la escucha de las necesidades del bebé, éste se ve frenado en su intento de construir, lentamente en su interior, la representación de un entorno maternizante que le proteja y le consuele. También se le negará forzosamente la posibilidad de identificarse un día con esta “madre interna”. La disfunción psicosomática surgirá como respuesta a todo tipo de conflictos, como un síntoma donde la psique busca, con medios primitivos e infraverbales enviar mensajes que serán interpretados somáticamente. Este tipo de mensajes son enviados por la psique cuando ésta se ve en peligro por el resurgimiento de acontecimientos dolorosos, culpabilizantes o amenazantes cuya representación es inmediatamente expulsada del consciente. De este modo, en tanto forman parte de la histeria arcaica, estos fenómenos dotados de un sentido psicológico pertenecen a un orden simbólico y son una respuesta somatopsíquica que da la psique en sus esfuerzos por prevenirse contra angustias que serían quizás psicóticas si alcanzaran la conciencia.

Los sobreadaptados (Liberman)

Los Sobreadaptados: padecen de “normalidad mental”, ellos no pueden fallar. La normalidad mental pasa a ser un síntoma. La vida de estas personas son obligaciones a cumplir. Explotan esta modalidad creando una relación tiránica de interdependencia mutua, y exigen la misma incondicionaldiad del objeto hacia ellos. Como los melancólicos presentan una generosidad patológica, si bien lo que brindan en parte realimenta su autoestima, no creen que los quieran por ellos mismos sino por los servicios que prestan. Funcionan con la ley “del todo o nada”, no desarrollan procesos progresivos o regresivos sino que dan saltos, son impacientes y viven la inmediatez.

Investigación tomada a pacientes de diferentes patologías que se incluyen dentro del a nosografía clásica:
Pacientes con conversiones pregenitales, organoneurosis o adicciones al trabajo (Fenichel), con Trastornos de elaboración de la posición depresiva (según Escuela Kleniana).
Es un sub-tipo de pacientes melancólicos. Pacientes incluidos en la patologíaü narcisista (en sentido amplio).

Características comunes de estos pacientes:

1) Suelen llegar a consulta psicoanalítica, derivados por un médico clínico no por su propia cuenta.
2) Su descompensación se manifiesta primariamente en el área corporal.
3) Tienen la capacidad de despertar en el clínico y en el psicoanalista la idea de “grave accidente potencial” (ejemplo Crisis hipertensivas severas, úlcera, infarto del miocardio y patología gastroduodenal. Además están predispuestos a accidentes de auto y cualquier tipo de accidente grave).
4) Generalmente son líderes productivos exigidos y exigentes, que constituyen el sostén del medio familiar y social en el que se desempeñan.
5) No conciben el ocio, ni mucho menos disfrutar.
6) No experimentan sufrimiento ni sensaciones de alivio, tienen perturbaciones para dormir, pero sin conciencia del trastorno que ello representa.
7) Definen su identidad a partir de lo que hacen y desde el lugar profesional que ocupan.
8) Para ellos el tiempo es espacio concreto que hay que llenar de forma inmediata.
9) En general las crisis aparecen en la edad media de vida (35/45 años), momento vital de replanteo de todas sus relaciones objetales.

Clínica

Estos pacientes padecen la tiranía de un objeto idealizado que funciona como Ideal del Yo, y en consecuencia lo que debería ser sublimación se transforma en idealización o en rasgos patológicos de carácter. Toman este Ideal como un fin y no como un medio (distorsión del sentido de realidad). Este Ideal del yo es proyectado en el mundo externo y el sujeto experimenta una demanda de adaptación desde afuera: se siente exigido por un medio al que tiene que satisfacer permanentemente con una productividad eficiente en detrimento del cuidado de si mismo. Por ello estos pacientes no pueden utilizar el recurso inconsciente de hacer una regresión útil en la búsqueda de una madre o sustituto materno que les brinde los cuidados necesarios en situaciones de emergencia, sino que su regresión se dirige a un vínculo materno-filial a través de la eficiencia. “recuperan a la madre en la empresa o profesión”.
Lo que más impresiona como más “normal” en estas personas es lo que corresponde a la parte psicótica de su personalidad: la sobreadaptación a la realidad externa, su trastorno del sentido de la realidad, su somatización (señal de alarma) es la denuncia adecuada de sus necesidades renegadas.
En vez de experimentar emociones sufren modificaciones corporales. El analista debería considerar que la somatización es un intento para detener el desenfreno adaptativo. También existen casos extremos como los de “muerte súbita”.

Constelación Familiar Infantil

Los padres son muy disímiles: uno aparentemente muy activo y el otro muy pasivo y descalificado.
La madres suele ser predominantemente activa, hiperexigente, trabajadora y fija ideales muy difíciles de alcanzar. Muy ambiciosa y voraz, sobrevalora los bienes materiales e impone a su hijo a una sobreadaptación precoz.
El hijo se encuentra ante la exigencia de meter que deslumbrarla permanentemente, por lo que se “identifica con el ideal de la madre” y ve al padre como una caricatura de aspectos pasivos y desvalorizados.

Hipótesis

Triada de Mecanismos básicos interrelacionados.
Sobreadaptación a los aspectos formales de lav realidad.
Renegación de la percepción interoceptiva cenestésica.
Splitting masivo cuerpo-mente que sustenta la renegación.

Existe una sobrecarga de las catexis de los órganos de los sentidos en detrimento de las percepciones provenientes de los receptores interoceptivos (dolor, fatiga, etc).

Mahler: Estos pacientes no han formado una imagen corporal total, esta imagen se va construyendo en los estadios finales de las simbiosis, punto de fijación de esta patología.
Reconstrucción de los estadios tempranos
Estos pacientes tuvieron un destete patológico con dos vicisitudes posibles:
1. Destete con características catastróficas causantes de fenómenos psíquicos tempranos que llevan al autismo con restitución delirante.
Perturbación del balance narcisista. Habría un investimiento libidinoso megalomaníaco del Yo, lo que clínicamente nos lleva a encontrarnos con una personalidad creativa delirante. Absoluta indiferenciación entre el Yo y el objeto el que es tratado como si fuera un aspecto yoico investido narcisistamente
Salida de este proceso. La fase simbiótica se ha perturbado en un momento temprano constituyendo una triada defensiva: retracción autista, vinculo con objetos inanimados y negación, lo que los lleva a crear un “fetiche psicótico” en lugar de un vinculo con un objeto transicional.
2. Huida del trauma del destete mediante una separación precoz de la madre, que lleva a una sobreadaptación a la realidad externa. En este caso lo “psicótico” es lo sobreadaptativo.
Perturbación del balance narcisista. En los pacientes de este grupo, referido a la libido objetal y libido yoica, siguen el modelo de enamoramiento, existe una sobrevaloración del objeto y una proyección del Ideal del yo, en detrimento de un investimiento yoico adecuado.
Salida de este proceso: la perturbación se ubica en un momento más tardío de la fase simbiótica, por lo tanto se acorta la fase de simbiosis normal y el niño pasa precozmente a la fase de separación-individuación.

Winnicott: Ninguno de estos pacientes ha podido formar el espacio intermedio que se crea entre el sujeto y el objeto, que permite el juego de la creación imaginaria. No ha tenido la posibilidad de crear un vínculo con un objeto transicional. Por eso en estos pacientes ha habido una perturbación en el espacio, en el tiempo y en el placer con respecto a las actividades lúdicas infantiles y todo es vivido como un trabajo u obligación, sin connotación posible del placer funcional salvo el que resulta “de la tarea cumplida”.

Bion: En cuanto al problema de las “Relaciones Objetales”, existiría una disociación entre el tomar el pecho de la madre (contacto material) y la relación emocional al darle el pecho; se habría suprimido la relación emocional con el objeto persistiría el material concreto, fáctico (real), la cosificación del vínculo (“splitting forzado”).
Lo externo es tratado como lo internalizado (como en el mecanismo persecutorio) y debido a que tienen que figurar en la realidad externa, no pueden hacer una “verdadera melancolía”.
Mente- Cuerpo. Es como que cada uno de estos polos sufre una evolución separada. El cuerpo queda sujeto al código visceral y la mente ignora las sensaciones cenestésicas, renegando de ellas y volcándose hacia la realidad externa prematuramente. Al no registrar las necesidades del cuerpo aparece el riesgo de vida.

El conflicto Psicodinámico Específico (Alexander, Escuela de Chicago)
Alexander dio origen a una nueva era en medicina con la aproximación psicosomática en que escribe que se trata de una orientación que intenta comprender las enfermedades no como procesos locales sino como perturbación de la coordinación total de los procesos orgánicos, incluyendo la participación de la personalidad total en los procesos patológicos. Definió tres conceptos para la investigación psicosomática: psicogénesis, conversión y especificidad.
Menciona tres categorías de procesos somáticos influenciables por factores psicológicos:
1. La conducta voluntaria.
2. Las inervaciones expresivas, y
3. Respuestas vegetativas a estados emocionales, adaptativas.
Teoría del conflicto o Teoría de la emoción específica (Alexander). Consiste en la activación de conflictos inconscientes (reprimidos) específicos inductores de reacciones fisiológicas causantes del desarrollo o exacerbación de la enfermedad. Así, la hipertensión esencial la asoció a la activación de conflictos relacionados con tendencias de hostilidad y competitividad. A pesar de su enorme influencia apenas ha podido ser demostrada empírica y experimentalmente. El modelo de Alexander cumplió un papel muy relevante en la diferenciación de los Trastornos Psicosomáticos y los Somatoformes.
Alexander distingue las afecciones causadas por una hiperactividad del sistema nervioso simpático (sistema implicado en las reacciones motrices de lucha o huida) y aquellas motivadas por una hiperactividad del sistema parasimpático (implicado en estados de reposo motor y de asimilación energética). Esta clasificación se corresponde con dos categorías de conflicto psicológico (la tendencia hostil agresiva y la búsqueda de dependencia); ejemplo de la primera sería la hipertensión y el hipertiroidismo y, de la segunda, la úlcera gastroduodenal y el asma. La disfunción aparece cuando las emociones no pueden expresarse normalmente y la energía permanece encerrada dentro del organismo de forma crónica.
Posteriormente, Alexander al afirma que el factor psicológico es un factor necesario pero no suficiente para la aparición de la enfermedad. Su etiología vendría dada por la conjunción de una serie de elementos: la vulnerabilidad constitucional del órgano afectado, una constelación psicodinámica característica (conflicto específico) y una situación ambiental desencadenante. Resumen el problema de la especificidad de la siguiente forma:
1. Una teoría única no puede abarcar todos los trastornos psicosomáticos ya que algunos son de naturaleza puramente histérica, mientras que otros son concomitantes vegetativos de una tensión emocional crónica.
2. No obstante, la mayoría de los síndromes que forman parte del grupo que llamamos enfermedades psicosomáticas o neurosis vegetativas se asocian, a menudo, a ciertos tipos caracterológicos o constelaciones emocionales características.
3. En todos los casos se debe tener en cuenta la vulnerabilidad constitucional del órgano afectado y la situación ambiental desencadenante.

0 comentarios: